El año pasado ya piqué los calabacines y más o menos me quedé contento. Creo que se ahorra algo de mano de obra, la rafia la recupero para las berenjenas de la siguiente campaña, se aporta algo de materia orgánica al suelo (además de las raíces) que, si bien no esta compostada y por tanto es de dudosa asimilación por las plantas, al menos mejora la estructura del suelo al envolverse con la arena y algo del abono gastado volverá al suelo cerrando el ciclo, creo.
Este año he invertido en un rotavator. Me ha costado 1700 euros y se puede decir que esta nuevo ya que (me fio del vendedor) tiene solo un uso y se nota. La hora de rotavator, al menos por aquí, está a 35 euros, y haciendo cuentas por encima al final he decidido comprarlo. Si pienso poner todos los años 8000 m2 de calabacín tiene un uso asegurado y luego también viene bien para enterrar las ”barriuras” de berenjena.
Es todo, salud y buenos alimentos.
1 comentario:
A ver si te expresas bien, de toda la vida a ese aparato se la ha llamado "retovato". Con esos tecnicismos no ten van a entender en los bares hombre. Un abrazo y enhorabuena por el blog que te lo estás currando.
Publicar un comentario