Trabajo 30 (general): Andando por el techo de plástico.

Una de las cosas que me da respeto es subirme encima del invernadero y andar por los alambres. Me manejo muy despacio por los cuadros. Por suerte no tengo vértigo pero a veces veo el suelo a través del plástico cinco metros por debajo de mí y hace que mire bien donde piso.


A finales de enero me subí para puntear unos parches que se habían puesto este verano en las ventanas y que el viento se había encargado de malear.

No me desplazo por encima como los “alambraores” ni como los “blanqueaores” que van corriendo, incluso sin plástico los primeros, cosa que bien les podría valer para encontrar trabajo en algún circo ahora que el trabajo escasea, pero hice lo que quería hacer.

El paisaje desde arriba es lunar y tengo que ir bien pertrechado de alambre y tenazas por lo que me pueda encontrar.

Es todo, salud y buenos alimentos.