El tensiómetro podemos decir que es un instrumento que hace las veces de una raíz artificial. Consiste en un cilindro de plástico de que en la parte inferior tiene una cápsula porosa de porcelana y en la superior un lector de presión. Si precio oscila los 100 euros.
Se llena con agua destilada y un antialgas y se cierra herméticamente. Se aparta la arena junto a un gotero y se hace un agujero de unos 10 centímetros en la tierra. Se clava entonces el artilugio y finalmente se tapa y se riega con agua para que quede bien sellado.
En el lector de presión mido lo que le cuesta al bicho sacar agua de la tierra y se sabe, según el cultivo, la fuerza máxima que pueden hacer las raíces para sacar el líquido elemento. Un suelo puede tener agua pero estar tan retenida por el propio suelo que no es útil para las plantas.
Yo no las hago sufrir demasiado y riego cuando la aguja marque 20 centibares. La bibliografía dice que se riega entre 15 y 30 centibares. A más presión más seca la tierra.
Es todo, salud y buenos alimentos.
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